“Le doy vueltas una y otra vez a lo mismo” “Me siento atrapado en un bucle de pensamientos negativos” “no puedo dejar de pensar en lo mismo” “puedo estar todo el día pensando en un mismo problema” “me quedó enganchada en mis propias preocupaciones”

Seguro que en algún momento de tu vida ha habido un problema, una preocupación, un miedo…que no podías quitarte de la cabeza, que te tenía atrapado y no eras capaz de dejar a un lado, generando mucha angustia malestar y agotamiento mental, a este patrón de pensamientos se le denomina rumia.

Pero, ¿Qué son los pensamientos rumiativos?

Son un patrón de pensamientos repetitivos, circulares, donde nuestra atención queda atrapada en un mismo contenido (real o imaginario) de forma recurrente durante un largo periodo de tiempo, sin que se llegue a obtener ninguna respuesta o solución. Pudiendo llegar a perdernos en nuestro mundo interno, en sus ideas, preocupaciones o inquietudes. Alejándonos del mundo que nos rodea y de las actividades que nos resultan placenteras.

En alguna ocasión podemos pararlos, pero a veces nos quedamos atrapados en ese bucle de pensamientos (normalmente pensamientos negativos) de los que nos es muy difícil salir.

El contenido de los pensamientos puede ser variado. Pueden ser preocupaciones reales, situaciones futuras imaginadas, errores o acontecimientos del pasado.

Este tipo de pensamiento no generar una falsa sensación de control. Pues imaginar todos los escenarios posibles (futuros) puede hacerte creer que preparas estrategias para posibles problemas futuros y  te ayuda a no volver a cometer ciertos errores, pero lo más probable es que no se de ninguna de esas opciones y aumente tu nivel de malestar, desconectándote e impidiéndote disfrutar del momento presente.  

¿Qué consecuencias tiene la rumia?

Este patrón de pensamiento repetitivos y excesivamente analítico (hiper-reflexivo) acarrear una serie de consecuencias negativas en el bienestar de la persona:

  • Aislamiento social.
  • Ansiedad y depresión.
  • Agotamiento emocional.
  • Problemas de atención y concentración.
  • Problemas de sueño.
  • Aumento del estrés.

“Le doy vueltas una y otra vez a lo mismo” “Me siento atrapado en un bucle de pensamientos negativos” “no puedo dejar de pensar en lo mismo” “puedo estar todo el día pensando en un mismo problema” “me quedó enganchada en mis propias preocupaciones”

¿Cómo puedo gestionar mis pensamientos rumiativos?

Seguro que en algún momento de tu vida ha habido un problema, una preocupación, un miedo…que no podías quitarte de la cabeza, que te tenía atrapado y no eras capaz de dejar a un lado. A este patrón de pensamientos se denomina rumia o pensamientos rumiativos.

1.Identifica que la rumia:

 Podemos imaginarlo como una bola de nieve cayendo por una gran montaña, al inicio la bola es pequeña y fácil de parar (si lo quisiéramos), pero a medida que desciende la bola, está cada vez más grande y frenarla implicaría mucho más esfuerzo. Por eso es tan importante identificar cuanto antes que estamos entrando en ese bucle infinito de pensamientos.

Puedes hacerte las siguientes preguntas:

¿Es una preocupación o un miedo real? ¿Es tan grave eso que me preocupa? ¿Realmente tengo pruebas de que vaya a suceder esto? ¿Puedo hacer algo en este momento para solucionarlo ¿Si sigo pensando en ello llegaré a una solución?

2. Salir de nuestra mente para contactar con el mundo que nos rodea:

Una vez identificado que estamos entrando en ese bucle, nos interesa cambiar nuestro foco atencional. Como hemos dicho anteriormente, este tipo de pensamientos atrapa o secuestra nuestra atención, para que esto no suceda vamos a recurrir a nuestros sentidos. 

Te pongo un ejemplo:

Imagina que vas por la calle, muy concentrada en un problema que has tenido en el trabajo, estás tan absorbida por los pensamientos que no te estás dando cuenta de que hay a tu alrededor. Pero de repente “pum” a la persona que va delante de ti se le cae un maletín muy pesado haciendo un gran ruido, en ese momento tu atención se desvía de tu mundo interno al exterior.

Por lo tanto, una vez identificada la rumia, centramos nuestra atención en el momento presente, descartando esos pensamientos. Podemos hacerlo a través de nuestros sentidos, intenta notar las plantas de tus pies, concéntrate en notar la ropa sobre tu cuerpo, sal a dar un paso y cuenta cuantas palomas te encuentras, concéntrate en no pisar las rayas del suelo, dibuja si es algo que te gusta hacer, escucha música y canta si es algo que disfrutas… Busca algo que sea de utilidad para ti.

Se compasivo contigo mismo, lo más probable es que no lo consigas a la primera, y que tus miedos, inseguridades o preocupaciones, sigan apareciendo.

¿Te sientes atrapado en un bucle de pensamientos negativos y preocupaciones que afectan a tu vida diaria? ¿Los pensamientos rumiativos te generan altos niveles de ansiedad o malestar emocional? ¿Te sientes abrumado por esta espiral de pensamientos que te impiden avanzar? Si de forma continua te quedas atrapada en un espiral de pensamientos, problemas, preocupaciones, que interfieren en tu vida diaria, quizás es el momento de pedir ayuda.

En Contigo Psicología online podemos ayudarte, reserva tu primera sesión de valoración gratuita y resuelve tus dudas.


Conócemos un poco más

Raquel Nava, psicóloga sanitaria, terapia online, psicología online, salud mental
Raquel Nava, psicóloga sanitaria, terapia online, psicología online, salud mental